La introducción del material reflectante.
El material reflectante se introdujo por primera vez en la década de 1930 para su uso en señales de alto y asfalto y, en la década de 1980, había evolucionado hasta convertirse en ribetes plateados en zapatillas y mochilas. El material reflectante se crea con pequeñas cuentas de vidrio esféricas (la mitad del tamaño de un cabello humano). Fabricadas con vidrio de calidad óptica, estas esferas microscópicas perfectas están recubiertas por un lado con aluminio y luego se organizan con el lado del aluminio hacia abajo y se adhieren al material para crear una superficie reflectante. El proceso permite que la luz rebote directamente hacia su fuente. No importa desde qué ángulo la luz incida sobre el material, el usuario queda iluminado y visto.
Eso significa que cuando la luz del faro de un automóvil incide sobre la tira, casi el 100% de la luz se reflejará y regresará directamente a la fuente. No hay difusión ni desperdicio, toda la luz rebota hacia el conductor.
Poco después, se vio en chaquetas de alta gama, ropa para correr, equipos para andar en bicicleta y uniformes de seguridad profesionales. Aunque cada vez más industrias y fabricantes comenzaban a utilizarlo, el material reflectante seguía siendo el mismo cordón delgado o parche de material plateado que siempre fue.
En los últimos años, los materiales reflectantes se han desarrollado e integrado en diversos equipos de seguridad para mejorar la visibilidad y la protección. Por ejemplo, los trabajadores sanitarios y otro personal que trabaja en condiciones de baja visibilidad ahora usan chalecos reflectantes. Estos chalecos suelen estar hechos con una tela de malla que respira y presenta múltiples tiras reflectantes hechas de pequeñas bolas de lentes. Cuando la luz incide en estos chalecos, refleja su fuente, haciendo que el usuario sea fácilmente visible para los conductores y reduciendo así el riesgo de accidentes.
Los materiales reflectantes ahora se utilizan comúnmente en equipos de seguridad vial, incluidos chalecos para policías de tránsito, trabajadores sanitarios y trabajadores de la construcción de carreteras. Este avance en la tecnología reflectante ha contribuido en gran medida a mejorar la seguridad en diversas industrias al garantizar que las personas sean vistas incluso en condiciones de poca luz.