Calentar y proteger la cabeza.
Los días son cada vez más fríos y muchos deportistas al aire libre se abstienen de entrenar en la estación oscura. A pesar de todas las condiciones climáticas, otros van al trabajo en bicicleta todos los días. Con el equipamiento adecuado tampoco es necesario renunciar al jogging o al ciclismo en otoño e invierno. A continuación se ofrecen algunos consejos.
Calentar adecuadamente
Si vienes de habitaciones con calefacción para hacer deporte al aire libre, el organismo primero debe adaptarse a las bajas temperaturas. Si comienzas a máxima intensidad de inmediato, inhalarás aire frío demasiado rápido y corres el riesgo de irritar tu garganta, bronquios y pulmones de esta manera. Esto, a su vez, aumenta el riesgo de resfriado. Los músculos y las articulaciones también necesitan más tiempo en frío para alcanzar la temperatura de funcionamiento. Lo mejor es calentar de cinco a diez minutos antes de practicar deporte y luego realizar el entrenamiento habitual.
No te pongas demasiado abrigado
Muchos deportistas recreativos se visten demasiado abrigados en invierno. Los deportistas se visten mejor con viento o grados bajo cero según el principio de las tres capas: ropa interior funcional, una capa aislante cálida como el forro polar, que no almacena la humedad, y una capa protectora. Puede ser, por ejemplo, un cortavientos transpirable que deje escapar la humedad de dentro hacia fuera, pero que impida el paso del viento, la lluvia y la nieve. La ropa de algodón, por el contrario, no es adecuada porque almacena el sudor y ayuda al deportista a refrescarse más rápido.
Proteger la cabeza y las manos.
También es aconsejable usar gorros, bufandas y guantes ligeros porque las personas pierden hasta el 40 por ciento del calor corporal en la cabeza y el cuello. Si andas en bicicleta en invierno, debes protegerte bien las manos y los pies del frío, de lo contrario pronto te adormecerás.
Para las manos, son imprescindibles guantes forrados y cortavientos. Dos pares de calcetines sólo ayudan cuando el zapato no está demasiado apretado porque el aire entre el pie y el zapato es aislante. Además, los cubrezapatos de neopreno y los pantalones impermeables transpirables ayudan contra las temperaturas gélidas.
Por seguridad
La ropa ligera y reflectante aumenta la seguridad de los corredores y ciclistas. Un chaleco de seguridad de color amarillo brillante o naranja también puede ayudar a los ciclistas a sentirse mejor en el tráfico. Los ciclistas también pueden aumentar su seguridad con material reflectante en las zapatillas. A medida que se mueven mientras pedalean, brindan más atención en la oscuridad y con poca visibilidad.
